Lo de empezar en El Puerto fue relativo; en realidad empecé en El Tomillar, unos kilómetros más al norte.....
El primer contacto con ese mundo entre la mar y la tierra se da al cruzar el puente san Alejandro, sobre el Guadalete, con sus esqueletos y sus monstruos.
Otro puente nos asoma al primero de los muchos caños marismeños que hoy cruzaremos; el san Pedro, que da acceso al parque natural de la Bahía, en el espacio de los Toruños. Por allí seguiremos hasta el campus de Puerto Real.
Tras llegar al campus, y cruzar la carretera, empezamos el largo trasiego por el paseo marítimo de Puerto Real, a cuyo final toca parada para desayunar; hasta aquí, una hora (en realidad, antes me alargué hasta el caño de la Cortadura......).
De Puerto Real se sale cruzando hacia el polígono Casines, al final del cual bordeamos una instalación junto al puente sobre la vía férrea, y descendemos al carril paralelo a ésta: empezamos el sendero Puerto Real-San Fernando, que en menos de media hora nos llevará a dicha ciudad.
El carril nos pasea por toda la marisma, contemplando antiguas casas salineras, caños, cortaduras,....muchos restos de un pasado no tan lejano, aunque por su estado lo parece.
Al llegar a San Fernando, el propio carril nos enseña lo que hay que hacer: cruzar bajo la vía férrea, llegar a la calle Cantabria, tomarla a la izquierda, hasta llegar a la carretera de la Carraca, que tomamos a la derecha hasta conseguir el inicio de la Ronda del Estero, ya con carril bici que no abandonaremos hasta la entrada a la playa de Camposoto.
Por la Ronda del Estero seguimos en presencia de la marisma, como no podría ser de otra forma.
Por fin, tras el largo tránsito por la carretera de Camposoto llegamos al final del único asfalto pisado, y empezamos el sendero de la Punta del Boquerón.
Seguimos viendo las construcciones que el hombre realizó para controlar y aprovechar la marisma.
Y llega la arena; para otro día quedará que organicemos una venida colectiva, y afrontemos con más tiempo este difícil tramo, aunque la recompensa merecerá la pena.
44 kilómetros en ida, y algo menos de vuelta (fui bastante más directo).
Aquí dejo un enlace para que pinchéis; se abrirá Google Eatrh (hay que tenerlo instalado, es gratuito) y podréis ver el trazado. Espero que disfrutéis, y que os apuntéis la próxima.
Enlace Google Earth
